Carlos Holmes Trujillo, el ministro de la infamia.
- ¿Es cinismo, negación o engaño el discurso retórico de Holmes Trujillo que en nada refleja el problema profundo que enfrenta el país?
- Colombia necesita un Ministro de Defensa y una política de seguridad consecuente con el propósito de reconciliación y con la necesaria implementación del Acuerdo de paz
Bogotá 7 de octubre de 2020. En el marco de la moción de censura contra el Ministro Carlos Holmes Trujillo que se realizó hoy en plenaria de la Cámara de Representantes, la bancada de la lista de la Decencia, los Representantes María José Pizarro y David Racero, así como la Representante Ángela María Robledo, por la Colombia Humana, y el vocero del partido Farc, Omar de Jesús Restrepo, cuestionaron las declaraciones, acciones, desprestigio y gestión de las instituciones que están a cargo de la cartera de Defensa.
Para la congresista de la Colombia Humana, Ángela María Robledo, son tres las razones por las cuales Carlos Holmes Trujillo debe irse del Ministerio de Defensa, “Primero porque no ha podido, ni ha tenido la capacidad de proteger nuestra vida en Colombia. Según el reciente informe del CINEP, la Policía con 296 casos, se ubica como el mayor violador de Derechos Humanos por encima de los grupos paramilitares con 223 y seguidos del Ejército Nacional con 106. Segundo, porque Holmes Trujillo es un déspota, un déspota porque abusa de su poder y pasa por encima de las leyes, de los límites que son claves para la democracia. Su desacato al cumplimiento del fallo de la Corte Suprema de Justicia es evidente. Y, en tercer lugar, porque es indigno, indigno como asumió su particular perdón a las víctimas de los desafueros del ESMAD, en especial con las ocurridas en noviembre del año pasado, supuesto perdón que lo único que consiguió fue revictimizar a los familiares de los asesinados.”
Por su parte, la congresista María José Pizarro cuestionó la ética y el honor del Ministro y precisó sobre la desconfianza y la falta de legitimidad que hoy sacude la cartera que lidera. “Hoy en los territorios, barrios y calles reina el miedo y la desconfianza sobre quienes deberían cuidar y proteger a la ciudadanía, desconfianza que carga la institución no solo por los hechos ocurridos, sino también por la negligencia y actitud dilatoria y negacionista del Ministro Carlos Holmes Trujillo, quien contrario a tener una actitud de enmienda y corrección de los problemas, y reparar el dolor que ha producido el respaldo tácito del actuar arbitrario de la fuerza pública, ha lesionado gravemente la confianza y el respaldo de sectores ciudadanos importantes del país como el de la juventud. Los hombres y mujeres que dan la vida por la patria con valentía y entrega no pueden estar representados por alguien que refleja todo lo contrario a la lealtad, el honor y a la ética militar”.
Así mismo, el congresista David Racero expuso las cifras del incremento de la crìminalidad en Colombia, resaltando que las disidencias de las Farc pasaron de operar en 56 municipios a 103 entre 2019 y 2020, el ELN pasó de operar en 99 a más de 160 municipios y resaltó que el Clan del Golfo actualmente hace presencia en 200 municipios del país. Para el Congresista “Nadie puede estar seguro con este Ministro”, destacando la manera en que se perpetró la masacre de Samaniego – Nariño, sin que el Gobierno tomara cartas en el asunto y dejando en evidencia el recrudecimiento de la violencia en Colombia.
Finalmente, Omar de Jesús Restrepo, en calidad de vocero del partido FARC, consideró que “El asesinato de Javier Ordóñez por parte de la Policía; el uso desproporcionado y criminal de la fuerza durante las protestas del 10 de septiembre pasado, que dejó un saldo de 14 muertos y aproximadamente 70 heridos por las balas del Estado; el asesinato de Juliana Giraldo a manos del Ejército Nacional; el fraude del Ministro a la resolución judicial que se constituye en violación al principio democrático de separación de poderes; el desconocimiento del poder legislativo y la violación a la soberanía nacional al autorizar el paso de tropas gringas por territorio colombiano sin previa autorización del Senado de la República; el asesinato de un líder social cada dos días y de un firmante de paz cada semana; el recrudecimiento del paramilitarismo y la indiferencia general del Gobierno y en particular del Ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, son razones más que suficientes para exigir su dimisión.”