Yo, tú, nosotras…y el patriarcado!

Reconozco que Andrés Jaramillo salga a ofrecer excusas públicas por sus desafortunadas calificaciones al referirse al incidente por todos conocido de justificar un supuesto delito únicamente por las circunstancias de vestido, horario y demás de la chica que denuncia fue violada.

Llevo muchos años trabajando la problemática de violencia contra las mujeres cuyas cifras siempre escandalosas, aumentan día a día.  Sabemos que cada hora una mujer es violada en Colombia. Medio millón de mujeres sufren este tipo de violencia en el marco del conflicto armado y frente a ello hemos propuesto un proyecto de ley que declare este delito como lesa humanidad.

Es por eso tan grave que frente a un micrófono alguien si quiera se a atreva a justificar un delito así. Porque casi siempre quienes violan y asesinan a las mujeres tienen «justificaciones» para hacerlo. Y es que el tema del lenguaje no es menor, la feminista Luce Irigaray nos ha mostrado cómo desde el lenguaje se afianza el patriarcado como una cultura dominante que subvalora y minimiza a las mujeres.

Siempre lo máximo tiene una connotación masculina, lo menor y más pequeño, es femenino. No será posible una condición de justicia e igualdad de hombres y mujeres, si reproducimos los vicios del machismo y ello incluye el lenguaje.  

Tal vez, Jaramillo sólo expresa lo que piensan los hombres de nosotras, pero  entre tod@s tenemos que aprender y ayudar a de-construir los imaginarios negativos que recaen sobre nosotras las mujeres por nuestra misma condición: No somos objetos, no le pertenecemos a nadie, no tenemos que pedir permiso para vestir determinadas prendas y llevar nuestro cabello de determinada manera. Aunque parezca increíble a muchas mujeres las matan por esas razones. La investigación de la Casa de la Mujer y Oxfam demostró ampliamente las múltiples restricciones sociales en que viven las mujeres en los territorios de Colombia. Y las humillaciones y vejámenes a que son sometidas por ser mujeres.  Soy una convencida que las leyes, las penas y las cárceles no son la solución pues, tenemos en el país un nivel de impunidad en violencia sexual de casi el 100 por ciento, pero las acciones judiciales ayudan y dejan también saldos pedagógicos. Esa es la razón por la que decidí emprender una acción judicial frente a las declaraciones de Jaramillo que nos afectan a todas las mujeres a las que nos gusta llevar minifalda y también tenemos los pantalones bien puestos.  

Ángela Robledo

Representante a la Cámara

Artículos relacionados:

Clic aquí para descargar la solicitud de investigación.